Sin duda alguna, Chile es uno de los más importantes animadores del Rally Dakar desde que llegó a Sudamérica y su ausencia en la edición 2016 mermó mucho el interés y espectacularidad de la competencia.
Por esa razón, la ASO (Amaury Sport Organisation), organizadora del Dakar, empezó temprano a negociar con el gobierno chileno su retorno a la competencia para la edición del 2017.
Pues el gobierno de Michelle Bachelet ha hecho notar que tiene poco interés en volver a recibir a la competencia motor más difícil del mundo en su territorio, por dos motivos fundamentales.
Uno es el impacto ambiental que el rally ocasiona a su paso, ya años pasados los grupos ambientalistas hicieron notar este aspecto como algo dañino al medio ambiente.
El otro motivo es el económico, el gobierno de Chile no estaría dispuesto a derogar los 4 millones de dólares que la ASO solicita para ser considerada parte del recorrido de la competencia este 2017.
La ministra de deportes de Chile, Natalia Riffo reconoció que la posibilidad es muy remota. “Nosotros después de darle una vuelta y sumado el ajuste fiscal en todos los ministerios, exceptuando Salud, el tema de los recursos está bien complejo. Piense que el año antepasado se invirtieron nueve millones de dólares en total, no sólo contando el canon”, afirma.
Por su parte, Etienne Lavigne, director general de ASO, ha hecho saber que tiene las intenciones de insistir que Chile sea parte de la competencia, incluso se llegó a hablar que podrían eximir a Chile del pago del canon de ingreso a la competencia, a cuenta de los desastres naturales que azotaron su territorio en los últimos años.
También se mencionó de la factibilidad de que Chile vuelva a ser el punto de partida de la competencia.
La última palabra la tiene el gobierno de Chile y todos los amantes del Rally Dakar esperamos impacientes el poder saber que, junto con Argentina y Bolivia, Chile volverá a brindar sus dunas para que sean parte del Dakar 2017.